En el blanco! Cómo mejorar el tiro con escopeta de caza
«Cazador absoluto, buenas piernas y pocos cartuchos». Este conocido refrán expresa la influencia de la puntería y la oportunidad en la caza. Ninguno de estos factores, si bien se piensa, guardan la menor relación con la suerte: la ocasión se busca, la precisión se entrena. Y a fuerza de errores y aciertos se va llenando el morral con aquellos trofeos que parecían inalcanzables en un principio.
Pero ¿cómo mejorar el tiro con escopeta de caza? La cuestión no es del interés exclusivo del cazador novato, pues también los más avezados desarrollan malos hábitos en su postura, olvidan la importancia del ‘ojo director’ o no prestan la debida atención al swing. En cualquier caso, la puntería es esencial para tener éxito en lances de caza mayor y menor. En las siguientes líneas desglosamos una serie de recomendaciones para desarrollarla.
5 claves para mejorar el tiro con escopeta de caza
Cuidar la postura y el movimiento
La corrección postural es determinante para el apuntado, seguimiento y disparo de la escopeta. Y es que la colocación y movimiento del arma involucra una serie de músculos y articulaciones que deben coordinarse adecuadamente. El conjunto de ellas, del hombro a la mano, deben funcionar como un bloque firme, evitando alterar su posición durante el apuntado. Esta es una respuesta lógica a la cuestión de cómo mejorar la puntería con escopeta de caza.
La rotación y movimiento del objetivo debe realizarse, por orden, con la cintura, la cadera y las piernas, nunca con los brazos. De lo contrario, el encare correcto de la escopeta se debilita, seguida de las probabilidades de acierto en caso de percutir el gatillo.
Las piernas actúan como trípodes y han de mantenerse ligeramente flexionadas, evitando cualquier rigidez. Además, se recomienda no bajar la guardia en momentos críticos, para evitar que la presa despliegue sus alas o su carrera en el momento más inesperado, arruinando así la oportunidad de hacer blanco.
Identificar el ‘ojo director’
Es común entre los cazadores novicios, al efectuar un tiro de caza con escopeta, cerrar uno de los ojos, disminuyendo al hacerlo un 25-30% su campo de visión y limitando sus probabilidades de éxito. El apuntado debe realizarse con los dos ojos abiertos, entendiendo que uno de ellos será el dominante o director, es decir, el que definirá el eje de visión y coincidirá con el pómulo que permanece apoyado en la escopeta.
Dominar el swing del disparo
El adelanto en el tiro de caza, también denominado swing, se define como la secuencia de acciones destinadas a localizar, seguir y acertar a la presa en vuelo, considerando las centésimas de segundo que se pierden entre la decisión de disparar y el disparo mismo.
Por consiguiente, para hacer blanco, debe adelantarse la mirilla en el momento de percutir el gatillo, cuidando de que el cañón realice un arco constante y fluido, sin desviaciones, como trazando una línea en el aire. El swing o adelanto en el tiro de caza con escopeta requiere práctica y actividades como el tiro al plato son un ejercicio útil.
Adaptar la técnica a la situación
La máxima «adaptarse a morir» es pertinente aquí. Sin un tiro de precisión con escopeta no puede llevarse el pato, la perdiz o el conejo a la cazuela. Con frecuencia, una racha de desaciertos se debe al empeño de cazar con una técnica inadecuada.
La realidad es que la técnica debe adaptarse, no imponerse a la situación. No se dispara igual en una cacería de perdices que en batidos de jabalíes u otro mamífero. Simplificando, existen dos variantes posibles: el tiro en parado y el tiro en movimiento o al vuelo. La adaptabilidad es una virtud para el cazador, indispensable para saber cómo mejorar la puntería con armas de fuego.
Recordar que la práctica hace al maestro
Aprender la teoría sobre el ‘ojo director’ o el swing es un primer paso, pues el cazador se define en la práctica de su actividad, y es ahí donde la mente y el cuerpo tienden a separarse. Estas enseñanzas sólo serán útiles si logran integrarse en la rutina del interesado, lo cual requiere tiempo, dedicación y constancia. A fin de cuentas, «el novato, tiro a tiro y paso a paso», citando otra vez el refranero.
Sin embargo, la fuerza de voluntad puede ser insuficiente para garantizar resultados. La frustración aparece como consecuencia del estancamiento, de la sensación de no avanzar. Inscribirse en cursos y clases de tiro con escopeta de caza puede acelerar este proceso. Están disponibles periódicamente en la Federación Española de Caza (RFEC) o en las escuelas de tiro dedicadas a su enseñanza.